Los menores de 16 años deben ir acompañados de un abonado/a familiar adulto (mayor de 18 años), que se hace responsable del menor. Siempre que se haga uso del centro, ambos deben permanecer, necesariamente, en las mismas instalaciones y/o en la piscina.
Los abonados infantiles que tienen 14 o 15 años pueden acceder sólo a las instalaciones con una autorización firmada por los padres, los cuales serán los responsables de que se respeten y cumplan las normas específicas de cada espacio.